Recuerdo que cuando comenzaron a perseguirme estaba solo
en casa y desperté repentinamente alrededor de las 4 am, regularmente cuando me
sucede eso salgo a caminar por la calle un rato, algunas veces con mi perro
algunas veces solo, pero ese día no lo hice solo mire por la ventana y vi que
estaba ahí, de pie, observándome fijamente, portaba una sudadera con capucha y,
una máscara completamente blanca, no era una máscara de porcelana, no era
brillante solo tenía una expresión de sorpresa. Estuvo ahí durante un rato,
observándome, sin hacer nada más que eso. Después de ese momento incómodo se
fue, solo se fue dejando en mí un gran desconcierto. Al día siguiente,
comenzando mis actividades en la escuela, en mi momento de descanso que utilizo
especialmente para caminar por las áreas verdes de la escuela hasta encontrar
una buena banca o una sombra bajo un árbol y disponerme a leer vi que,
nuevamente, apareció esa persona con máscara, estaba frente a mi a unos cuantos
pasos, observándome, esta vez decidí acercarme a él para no tener ese
desconcierto de la noche anterior, pero cuando me levante y volteé la cabeza
para verlo de nuevo ya no estaba, no vi ni una señal de la dirección que tomó. Al
finalizar mis clases, decidí tomarme un descanso e ir al cine, llegué a creer
que estaba alucinando por la falta de sueño que había tenido los últimos días,
creí sería algo bueno para mi. La película llevaba ya una hora de duración
cuando me comenzó a molestar el sonido de un teléfono celular, era muy molesto
escuchar además a la persona que hablaba, no entendía por que nadie decía nada,
volteé y ahí estaba de nuevo, la misma máscara la misma sudadera, no me
observaba, esta vez no me observaba hasta que se percató que yo lo veía a él.
Tuve mucho miedo, para cuando me di cuenta ya estaba en casa tomando un baño,
pensando en quién era esa persona y el por que me atormentaba, no pude dormir
esa noche, no me dejaba en paz la imagen de esa mascara en mi mente, retumbante
y clara, el miedo que estaba infundiendo en mi, sus apariciones repentinas,
tres actos que no me dejaban en paz que sabía que no me dejarían estar
tranquilo, así que decidí salir a la calle y buscarlo, estuve durante 1 hora
caminando y volteando hacia los lados para ver si podía ver un rasgo de él,
comencé a creer que mi mente me engañaba, que estaba alucinando y que era mejor
regresar a casa hasta que al llegar a una esquina cercana lo vi, estaba ahí sin
hacer nada con la misma ropa de siempre pero esta vez estaba de espaldas, sin
observarme, como esperando algo. Sabía que era él y que en cualquier momento
voltearía la cabeza y me observaría, y yo tenía el valor suficiente para no
correr, para esta vez no salir huyendo de su tormento. Él seguía ahí bajo el
poste de luz que lo alumbraba, después vi como empuño sus dedos, sin hacer otro
movimiento más que empuñar sus dedos y seguir observando, hasta que comenzó a
caminar, despacio en medio de la calle y yo lo seguí, después comenzó a correr,
yo comencé a correr también, no sabía si él ya se había percatado de mi
existencia tras él, pero no me importaba, estaba decidido a que dejara de
atormentarme, entro a una casa y dejo la puerta abierta. No lo pensé y entré,
estaba oscuro, completamente oscuro, saque mi teléfono para poder observar mis
pasos y vi una máscara, la levante y era exactamente igual a la que me
perseguía, seguí caminando y había más máscaras por el suelo, después tope en
un estante que contenía más máscaras, todas con la misma expresión eso me
aterrorizo aún más y solté la máscara de mis manos, se cayó y se rompió, me
agache para recoger los pedazos y me topé con sus pies, levanté la cabeza y ahí
estaba, exactamente con la misma máscara y con la misma expresión.
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